8 de abril de 2010

Los socios


Atlético Tucumán rumbea hacía el Nacional B y el periodismo deportivo local comienza a mostrar su habitual gatopardismo

De las luces del ascenso a las sombras del descenso sin tocar la perilla. Con la velocidad de un Fórmula 1 el periodismo deportivo local comenzó a despotricar. Cuando la malaria llega, salvo los hinchas, todos toman distancia. Los colegas... mis colegas son los primeros de la lista.

Ninguno de los integrantes de la larguísima lista de periodistas deportivos ensayó un análisis sobre lo que venía tras quedarse con el título del Nacional B y con qué armas Atlético iba a enfrentar ese futuro inmediato. Ninguno criticó decisiones. Ninguno opinó sobre las condiciones de los futuros contratados... nada.

Como sabemos, al periodismo deportivo tucumano no le gusta hacer enojar a los dirigentes. Nadie quiso perderse las credenciales que le permitan ver gratis a Boca o River o, en todo caso, arriesgar el negocio de la venta de publicidades que en muchas casos provienen del bolsillos de los dirigentes. Cuando el negocio le gana a la profesión tenemos lo que tenemos...

Cómo estará hoy la situación de Atlético que cuando ya el agua pasó peligrosamente la línea de flotación, ese mismo periodismo deportivo ya no puede esconder la basura bajo la alfombra. Entonces ya se escribe y se propala por los medios con absoluta indolencia sobre las aptitudes de la plantilla y se condena actitudes de los integrantes de la misma con una desenfrenada crueldad. Los jugadores que antes eran olfeados por la grey periodística para que les den una nota, hoy adquieren el carácter de una banda de facinerosos.

Ni muy muy... ni tan tan. Hubo apellidos de más y apellidos de menos. Atlético recibió muchos goles y, sin embargo, se ensalzó la actuación de defensores como Páez, Barone, Villavicencio. Atlético mantuvo al 95% de los volantes que ganaron el Nacional B y sin embargo su dirigencia se contrató a lo loco más volantes.

Nadie escribió una puta línea advirtiendo, aconsejando, opinanado y mucho menos criticando. Está pasando lo mismo que cuando Belgrano Cultural y Deportivo se despedía de la Liga Nacional A en la temporada 2000/2001. Cuando el descenso estaba sentenciado los "analistas" locales comenzaron con las críticas.

Habían pasado ocho meses de competencia sin decir ni escribir una sola crítica contra una dirigencia que en la fecha diez del aquel torneo había liquidado media plantilla porque los jugadores tuvieron la "pésima" actitud de solicitar que les paguen sus haberes.

O sea, más de lo mismo... lo de siempre bah

2 comentarios:

theilermarcelo dijo...

Negro, por favor corregime si no es así: no solo era el medio campo del Nacional B, sino el mismo del Argentino A. Montiglio, Granero, Erroz y Longo. Un abrazo

Dos cortas una larga dijo...

así es mi querido marcelo y además Sarría