28 de julio de 2009

Pase al pizarrón!!!


Ni pibes para eso hubo. El Gobierno de Tucumán ordenó el reinicio de las clases y los alumnos no fueron ni a punta de pistola.

No se entiende, sinceramente, no se entiende. El rey José decidió que los tucumanitos regresaran a clase en el pico de la pandemia por la gripe A en nuestra comarca. "No le veo en que favorece reiniciar una semana después" había dicho el capo máximo de la provincia, la semana pasada.

Ningún portador de micrófono y/o grabador repreguntó en la improvisada conferencia de prensa. No me cabe que el periodismo vernáculo sólo repita noticias y cero opinión. Muchos de los que estaban allí sosteniendo un micrófono seguramente no enviará a sus hijos al colegio.

Ayer los padres tucumanos dieron un ejemplo de solidaridad y prudencia. El Estado Provincial sigue a contrapelo de la población con sus decisiones. La conduccion se cree que todo se soluciona en esta provincia con asfalto nuevo y, sin embargo, los muertos por la pandemia no reciben la oficialización de si la causa de los decesos es la enfermedad que pone de rodillas a las políticas de salud en nuestro país.

Sin embargo, ese mismo gobierno que decide lo que no debe y en contra del sentido común, después, manipula la información y justifica con un irreal 50% de asistencia del alumnado a los establecimientos educacionales. Los medios, por su parte, tiran por tierra los numeros de José con un lapidario 70% de inasistencia.

Elijan una escuela y párense a ver cuantos chicos ingresan y podrán observar la realidad. El plan sanitario armado para el reinicio del periodo escolar hizo agua por donde se lo mire. El alcohol en gel no llegó nunca, por ejemplo.

Ningún pibe se va a recibir de burro porque empiece una semana más tarde. El apresurado análisis de las autoridades, priorizando la educación por sobre la salud es una estupidez, de idéntico tamaño que retacear información en cuanto a la cantidad de los infectados y de las verdaderas razones de las muertes que se suceden.

México dio el ejemplo de como atacar al virus. Cerró todo durate cinco días sin miramientos por ningún sector de la economía. No le importaron los lobby. Lo hizo y punto.

Acá no. Hubo que pensar en los hoteleros en medio de la temporadita de vacaciones y encima no vino nadie. Hubo que pensar en los restaurantes porque los turistas debían tener opciones para morfar y ningún foráneo se sentó a leer la carta. Hubo que pensar en el comercio, porque las ventas vienen a los tumbos.

En todos esos sectores pensaron las autoridades, menos en al salud de la población. Si no mandaron a cerrar todo, dónde se busca la excusas de extender el período de vacaciones.

Y para el último, ni lerdos ni perezosos, los empresarios pidieron una prórroga para el pago de impuestos. No hay nada que hacer, algunos tipos no tienen cura.

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