11 de septiembre de 2008

La selesión

El Coco elige nombres de bien y sistemas de mal. Desde que asumió no sumó muchos minutos bien jugados, pero ojo... los jugadores juegan, el Coco no.



En mi columna oral de Radio Universidad dije en la previa que el fútbol es el ámbito donde más se desarrolla la libre expresión. Cualquiera habla. Cualquiera opina. Hasta los que no saben lo hacen. Por eso se multiplicaron las críticas al 1-1 ante Perú.

También dije en esa oportunidad que el fútbol es un juego imperfecto, porque se practica con las gambas. Usar las extremidades inferiores hace que la precisión sea un bien preciado y que cuando la pelota empieza a rodar puede pasar lo que sea. Ante Perú pasó. Lo que sea fue un empate y no estuvo mal.

Argentina no mereció ganarlo ni siquiera cuando el "Cuchu" puso el 1-0. Ni una goleada podía disimular una producción lamentable. Argentina tiene problemas de identidad a la hora de jugar. Messi, un individualista a ultranza, no se condice con la virtudes (ausentes esta vez) de Riquelme. Uno va pa' adelante, el otro se toma su tiempo. Uno no necesita de compañeros para crear peligro, el otro si.

A uno, no le importa si hay un referente en el área. El otro, en cambio, necesita a quien tirársela para aprovechar su pegada. Uno es vertical y veloz, el otro es armador y lento. Si los dos jugadores en los que descansa el desequilibrio que la selección puede generar son tan disímiles, el que elige los jugadores tiene respondabilidad en el rendimiento.

No es posible esa conjunción de virtudes. Uno juega su juego y el otro el suyo. El "Kun", ante Perú quedó lejos de todo y de todos. El "Coco" elije a Jonás para darle dinámica, pero el ex Velez se lesiona y permite el ingreso de Bataglia. Ahora me pregunto y les pregunto: ¿que tiene que ver el juego de uno con el juego del otro?

Creo que no hay plan "B", tampoco entiendo mucho el "A". Para colmo, los colegas de los grandes medios, como no saben hablar mucho del juego hablan de la cocina. Por eso especulan confabulaciones porque el plantel fue a festejar el gol con el "castigado" Heinze. "Los jugadores hacen causa común y ¿desafían? al técnico" se animaron a decir. Cómo lo saben?

En honor a la verdad, no se merecía un descansito el "Gringo"? Contra Paraguay fue responsable en el gol en contra y él lo asumió. "Los códigos del fútbol no fueron respetados por el técnico que hace de ellos un culto", dicen los sabiondos de los medios con sabiduría "Rialesca".

Al final me parezco a ellos (mis ¿colegas?), porque termino ocupándome de sus dichos y dejo de hablar del juego. Argentina no juega bien y el poco tiempo de laburo, si bien influye, no puede ser un atenuante de importancia. Otras seleccciones tienen el mismo tiempo y, por lo menos, se les lee un estilo... algo. A la Argentina no. Para colmo su lentitud exaspera. Mil pases para los costados y para atras. Cuando llega a Messi, este juega "su" partido y para colmo pasa su velocidad a nafta y sus compañeros del medio, siguen a gas.

Brasil apuesta a la habilidad de sus jugadores, a las subidas de Maicon, a la potencia de Luis Fabiano y, por sobre todo, a su orden defensivo. Chile a lo Bielsa con mucha dinámica y presión, pero sufriendo atrás. Paraguay a su orden táctico y defensivo. Si juegan Cabañas o Santa Cruz es sumamente peligroso. por dar ejemplos que a los otros, algo se le ve.

En la oficina decían que basta de estrellas, que Basile tiene que convocar a jugadores con hambre y solo tres o cuatro referentes. El seleccionador necesita tiempo para acomodar ideas y estilos. Pero ese tiempo sólo aparecerá en la última etapa antes de viajar a Sudráfrica. Por ahora habrá que capear el temporal y darle pa' delante. Pero como sea, hay que mejorar un poquito.

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